Sobre un cerro junto a la villa, se encuentra el cementerio viejo y lo que fue parroquia de San Sebastián.
La construcción de la iglesia de la Santa Cruz, hizo que dejara de utilizarse la iglesia de San Sebastián, más alejada del centro, e hizo que se arruinara.
Pasaron los años, y ya sin cubiertas, pasó a utilizarse como cementerio, función que dejó de tener en la década de 1990 al construirse a las afueras del pueblo otro camposanto.
En origen de estilo románico, del que se conserva la portada con arco de medio punto y arquivoltas, con posterioridad se reedificó en estilo gótico de una sola nave y torre, construido enteramente de mampostería. Hoy en día del que sobrevive la caja de muros.
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